Siendo pequeña, soñé que era una mariposa.Guardé el sueño en una caja de cristal. Pasó mucho tiempo y al abrirla encontré cinco adorables maripositas que me empujaron a volar junto a ellas. El sueño no se esfumó. Aún vive dentro de la cajita de cristal. Tal vez algún día nazcan otras maripositas y seguiremos volando, como en mis sueños.